Sala Mytho, Bilbao
Que los mensajes rotundos pueden resonar muchas décadas
después de su creación es algo que se palpa especialmente en el movimiento
punk. Frente a las modas pasajeras del momento que afectan incluso a estilos
supuestamente minoritarios, otros valientes siguen a su rollo sin arrugarse
ante nada por mucho que el mundo gire, ya no se vendan discos y las redes
sociales se conviertan al final en el mejor método de promoción posible. Las
preocupaciones de los tipos corrientes como llegar a fin de mes permanecerán en
el mismo lugar donde se dejaron. Hasta que alguien decida coger la antorcha.
En un contexto de turbulencia social precisamente se
formaron Angelic Upstarts allá por la primavera de 1977 tras ver actuar a The
Clash en la universidad de Newcastle y convencerse de que ellos podían hacerlo
mejor que los teloneros de aquel mítico bolo, The Slits y Subway Sect. Y una
vez metidos en faena no tardaron en convocar a una importante cantidad de
seguidores que el voceras Mensi calificaba como “una mezcla entre hooligans y delincuentes”. Al igual que sucedía en
otros combos punk de la época, hubo momentos de provocación con uniformes nazis
en el escenario y hasta una cabeza de cerdo que simbolizaba el típico casco
inglés de los policías británicos. Todo sea por epatar.
Con una trayectoria tan longeva, sorprende que todavía
saquen discos bastante aceptables como el doble ‘Bullingdon Bastards’ de 2015 y
sus recitales continúen siendo una descarga absoluta de energía en la que no se
intuye ni de lejos la jubilación. Un hecho que ya por sí solo debería bastarles
para abarrotar recintos como si no hubiera un mañana, pero ya se sabe que el
mundo está plagado de injusticias.
Por lo menos a su paso por la capital vizcaína lograron
aglutinar un puñado reseñable de fieles suficientes para montar un buen
jolgorio en la sala, aunque en vista del bolazo que se marcaron aquello hubiera
merecido contar con el doble o triple de asistentes. Calentaron el ambiente previamente
los algorteños Erasoka, que
demostraron un nivel importante en el aspecto instrumental y compositivo con
temazos potentes que cuando les daba por el castellano recordaban a Rat-Zinger.
Homenajearon a los pioneros del Oi! con alguna versión de The Four Skins y lo
cierto es que aprovecharon con habilidad su tiempo en escena hasta conseguir
que pasara volando. Un entremés adecuado.
Erasoka aprovechando bien el tiempo. |
Hay conciertos que se asemejan a una suerte de recorrido por
toda la trayectoria de un grupo, una retrospectiva que lo mismo agrada al fan
irredento de siempre que al curioso que se acerca hasta allí con solo tres o
cuatro piezas en su cabeza. Ambas posturas son igualmente respetables, pues no
debería censurarse jamás que alguien al margen de modas y demás movimientos artificiales
decida acercarse con humildad a descubrir una banda sin ánimo de sentar
cátedra. No nos pongamos trues.
Como una especie de baúl de los recuerdos comenzó el bolo de
Angelic Upstarts con “2,000,000
million voices”, corte homónimo que da nombre a su histórico tercer álbum, y no
tardaron en acordarse asimismo de su no menos legendario debut en “Teenage
Warning”. La pinta del grandullón vocalista Mensi quizás intimidara al inicio,
aunque si uno bucea en su trayectoria descubrirá a un tipo íntegro como pocos,
un sindicalista de verdad que nada tiene que ver con esos vividores amantes de
las mariscadas a los que se ha asociado el término en los últimos tiempos. Un
señor capaz de grandes gestos como cuando en un garito abroncó a unos
individuos que se alegraban de que la policía cargase contra unos mineros
durante una huelga.
Sin palmas ni demás excusas baratas para perder el tiempo,
fueron como un tiro, casi inmutables al entusiasmo que suscitaban entre la
afición, por ahí por ejemplo había una chica muy guapa de las primeras filas
que vivía la música con una pasión tremenda y que hasta se atrevió a colocar
una pegatina en la pierna de esa torre humana que es Mensi. Según nos enteramos
posteriormente por una amiga suya, al parecer era de un grupo en el que debía
de tocar algo. No hay límites para promocionarse.
La solidez compositiva de su trabajo más reciente quedó
patente en “Tories, Tories, Tories (Out, Out, Out)”, todo un trallazo para el
directo, y censuraron a los que en su país “matan
animales por diversión” en “Give The Fox A Gun”. Los enfrentamientos del
voceras con las autoridades han sido frecuentes, algunos sonados como el que
protagonizó en 2013 cuando él y un amigo se enfrentaron a unos fascistas que
habían atacado a una fotógrafa durante una marcha racista. Prueba de esa
tensión permanente entre el cantante y las fuerzas del orden es “You’re
Nicked”, en cuya presentación incluso relató que más de una vez le detuvieron
al andar por la calle simplemente “por
ser punk”.
Y en el himno obrero “Solidarity”, entre los puños alzados,
el gran hombre rememoró cuando se arrancaban con esa pieza en el País Vasco
hace la tira de años. No podía faltar tampoco la mención a Margaret Thatcher, “una puta bruja que está muerta y no va a
volver, esa es la buena noticia”, antes de “Woman In Disguise, otro de sus
clásicos imprescindibles. Un festín total.
El empeño de Mensi por disociar el patriotismo de los
movimientos de ultraderecha puede parecer un poco raro por estos lares, al
igual que el papel de los soldados en misiones en el exterior del que habla
“Last Night, Another Soldier”, pero ya sabemos cómo son los ingleses en lo
relativo a la flema británica. El lenguaje que sí que es universal es el de los
pogos descontrolados que brotaban cada dos por tres, un gesto de satisfacción
que no necesita traducción alguna. Y para todos los fans, ahí estaba su
legendario “I’m An Upstart” de 1979, una llama para poner a cualquiera a tono
de inmediato.
Las expectativas del personal quedaron tan colmadas que las
peticiones de bises fueron estruendosas. Y no defraudaron en absoluto al
regresar con una piedra angular del punk del calibre del “If The Kids Are
United” de Sham 69, que terminó de elevar los ánimos hasta la estratosfera
mientras el voceras cedía el micro antes de un espectacular acelerón final.
Soberbio.
Frente a otros combos de los 70 que viven de las rentas y
cuyo nivel en las distancias cortas es más que discutible, estos históricos
subversivos no engañan a nadie, y como hemos dicho anteriormente, si existiera
un mínimo de justicia en este mundo, deberían llenar estadios. O quizás no,
porque ni falta que les hace. Ellos son los auténticos supervivientes de
tiempos salvajes.
TEXTO Y FOTOS:
ALFREDO VILLAESCUSA
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarsin palmas ni demas excusas baratas para perder el tiempo? NO SEAS SUBNORMAL! aplaudirle a un artista por que se le admira no es "excusa barata" ni "perder el tiempo". es algo completamente natural.
ResponderEliminar2) al margen de modas y demas movimientos artificiales? espero que no lo digas por el punk por que si es asi ya no eres subnormal, eres un HIJO DE PUTA directamente (si no te refieres al punk no pasa nada) el punk no es una moda es una contracultura (que exista gente que lo agarre por moda es otra cosa) y no hay movimiento mas en contra de lo artificial que el punk (unos punks sin dinero tocando en una casa okupa hecha mierda o en la calle sin esperar ni dinero ni fama a cambio de ello y solo por el gusto de tocar, es lo mas anti artificial del mundo)
en cuanto a lo de "no nos pongamos de trues" defender lo que para muchos es mas que una moda no es ponerse de true "lince". por ejemplo, hoy mismo tuve una discusion con una periodista imbecil que saco un articulo en internet llamando "moda nostalgica" al punk, explicandole que el punk no es una moda y nunca se ha ido y que desde que nacio no han dejado de crearse bandas, sellos, fanzines etc.. y la juntaletras me dijo que lo que pasaba es que ella no habia ido a un festi de punk desde hacia mas de 20 años y que por eso no estaba enterada.
ese es el problema de los casuales, que muchos de ellos terminan hablando estupideces sobre movidas en las que en realidad nunca estuvieron metidos.
no leo respuestas por que no quiero empezar discusiones estupidas con esto.
Vamos a ver, lo de las palmas lo decía por los grupos que tiran horas y horas pidiendo palmas a la peña, obviamente no has estado en ninguno de esos conciertos, por lo que me alegro que todos los bolos en los que has estado han ido como un tiro.
ResponderEliminarRespecto a lo de modas y demás movimientos artificiales, si hubieras leído con atención la entradilla, te habrías dado cuenta que ni de lejos hablaba del punk, pero bueno, somos uno de los países europeos a la cola en comprensión lectora y este es el resultado.
Y lo de ponerse true, lo decía por los que critican a los que van a conciertos conociendo dos o tres temas del grupo, para repartir carnets de autenticidad ya está la policía y otro tipo de instituciones. Ya das a entender que yo soy uno de los "casuales", indigno por tanto para hablar de punk. El hecho de que no haya ninguna respuesta, ya debería hacerte mirar tu extrema susceptibilidad, aparte del hecho de comentar un artículo de hace cuatro años, que tampoco es muy normal.